1- ANTES DE NADA, DEFINE TU OBJETIVO: El primer paso para conseguir lo que quieres, es saber exactamente lo que quieres, así como buscar el “por qué” lo quieres. Es importante que conectes y seas honesto contigo mismo. ¿Dónde quieres llegar?
2- TRABAJA LA FUERZA PARA LLEGAR A TU OBJETIVO: Es decir, clarifica el objetivo para poder llegar a él. Hazte las siguientes preguntas; ¿Cómo lo quiero? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cuáles son las consecuencias?
3- ESTABLE TAREAS DE FORMA PROGRESIVA: Puedes empezar estableciendo tareas con poco volumen y que sean sencillas y cómodas para ti. Poco a poco ir aumentando, el volumen, la dificultad, etc. Para hacerlo realidad, escríbelo, establece un plan. Normalmente no somos conscientes de los beneficios de escribir, en este caso nuestro cerebro hará un esfuerzo superior para concentrarse.
4- GENERA UN FEED-BACK POSITIVO: Celebra cada pequeño paso, tus avances y tus logros. Tu cerebro lo asociará a un refuerzo positivo que te ayudará a continuar y perseverar. Registra tus avances, escríbelo o compártelo con los demás.
5- RODEATE DE GENTE CONSTANTE: Busca personas con las que compartas valores e inquietudes. Apoyarte y compartir con los demás es esencial para nuestro bienestar y el bienestar te permite ser más constante.
6- UTILIZA TUS PROPIOS RECURSOS: Pon en práctica aquellas estrategias o recursos que a veces sin darte cuenta usas en otras cosas de tu vida. Pregúntate en qué cosas has sido o eres constante y fijate cómo lo has hecho.
7- FLEXIBILIDAD: Recuerda que ningún camino fácil te llevará a un gran objetivo. Se flexible contigo mismo, las recaídas forman parte del camino. Desarrollar la aceptación y una actitud positiva te ayudará a no tirar la toalla y seguir trabajando la constancia. Permítete a veces fallar y volver a empezar.
8- VISUALIZA EL RESULTADO: Te ayudará a tener fuerza y desarrollar la constancia para pasar a la acción. Piensa cómo te sentirás cuando consigas tu objetivo, todos los beneficios que obtendrás y desarrolla el poder de la imaginación, experimenta la sensación cómo si lo hubieras conseguido.
9- COMPROMISO: Comprométete contigo mismo y tu objetivo. Y es que cuando nos comprometemos con una tarea o con un proyecto nos permite concentrarnos más en el presente e involucrarnos con las cosas que realmente deseamos. Recuerda que tú eres capaz.
10- ACTITUD: Será esencial cultivar una actitud positiva para trabajar la constancia. Entrena tu cerebro, para ello te propongo que cada día al levantarte escribas pensamientos positivos relacionados con tu objetivo, lo que deseas y aquello que harás en el día para continuar desarrollando la constancia.
